El trío británico no defrauda en el siempre complicado segundo trabajo. Con el mínimo de recursos consiguen el máximo en canciones susurradas, nocturnas y enigmáticas. La incógnita sigue sin despejarse y eso nos gusta mucho.
ESTOS AMIGOS TE LO PRESTARÁN...
Divorce – Drive To Goldenhammer
Hace 21 horas